Vivimos en la segunda década del siglo XXI ya bien insertados dentro de la Sociedad de la Información y a muchas personas y empresas parece serles intrascendente o inconsecuente este hecho. Como seres humanos, somos naturalmente resistentes al cambio. Preferimos de forma instintiva, vivir en un ambiente que creemos que podemos controlar, donde pensamos que las condiciones de nuestro entorno son previsibles, donde de algún modo creemos que podemos vivir en un futuro que creemos podemos predecir.
Zebra by Andy Warhol
Pero si hay algo que caracteriza a la Sociedad de la Información, al nuevo ecosistema global en el que vivimos, es el cambio, y como tal, debemos adecuarnos a él y hacernos competitivos y competentes o simplemente extinguirnos y sucumbir ante empresas o profesionales mucho más flexibles, dinámicos y adaptables al cambio.
Si estamos de acuerdo en que el mundo cambia tan dinámica y vertiginosamente nos toca hacernos algunas simples preguntas ¿Quién soy yo para la nueva Sociedad 2.0? ¿Cuál es mi perfil digital? ¿Cómo interactúo con el mundo y cómo éste interactúa conmigo?
Tengo la suerte de trabajar con Inés Temple, una de las profesionales que mejor domina el concepto de “Marca Personal” y con ella, y los candidatos de DBM hemos estado explorando en diversos talleres la importancia de la versión digital de la “Marca Personal” lo que me lleva a las siguientes conclusiones:
- Nos guste o no, todos debemos tener una marca personal digital, que debemos cultivar, enriquecer y proteger. Ella trabaja por nosotros, amplia nuestra red de contactos profesionales, sociales y culturales 24 horas al día y nos abre las puertas a oportunidades que de otro modo permanecerían cerradas.
- No existe la privacidad. Desde que cualquier teléfono celular es una grabadora, y una cámara digital de fotos y video, y desde que este material puede ser publicado en la web en segundos, debemos ser siempre 100% concientes que no tenemos privacidad cuando estamos en público y que cada uno de nuestros comentarios y actitudes puede actuar en nuestro beneficio o en nuestra contra en todo momento.
- Son muchos los canales digitales que deberíamos explotar, pero por lo menos, recomendamos a todo profesional que sea conciente del mundo en que vive, que trabaje inteligente, creativa y convergentemente los siguientes canales:
- Blog: ¿Eres bueno en lo que haces? ¡Demuéstraselo al mundo! Crea un blog que le diga a tu entorno a) quién eres, b) qué sabes c) qué tienes que aportar… y luego escucha a tu entorno, y conversa con él. Descubrirás lo apasionante que puede ser interactuar con tu ecosistema de stakeholders.
- Facebook: Sí, es una red social y no hay contactos más importantes que los de nuestra red social. En Facebook también están nuestros compañeros de trabajo, nuestros jefes y colegas de otras empresas… entonces, ¿más vale que gestionemos con más conciencia nuestra imagen digital no? Cuando escribas tus posts en tu blog, postéalos luego también en tu Facebook.
- Twitter: En mi opinión, si no estás en Twitter, te estás privando de la red más excitante, enriquecedora y disruptiva de la nueva web 2.0. No es sólo lo que se intercambia, es lo que se aprende, lo que se vive, lo que se conoce, en un ambiente de cooperación global que debes experimentar. ¡Ah! ¡y no olvides twittear los posts de tu blog aquí también!
- LinkedIn: Pongo LinkedIn en cuarto lugar, porque el nivel de interacción que se logra en las otras 3 redes es mucho más poderoso. Sin embargo, la cereza del postre lo pone un impecable perfil de LinkedIn que dirá mucho de quién eres en el mundo profesional.
Puedes complementar tu perfil digital con Youtube, Scribd, Quora, Docs.com y tantos otros servicios 2.0 complementarios que no dejan de aparecer. Pero lo más importante es que mantengas consistencia en tu tono de voz, tus contenidos y que seas conversacional, cortés, interesante y ¿por qué no? divertido. No te arrepentirás. En la próxima reunión, en el próximo directorio, te darás cuenta que ese carísimo SmartPhone que solías portar sólo porque se veía bien ahora tiene un nuevo y verdadero significado: es una verdadera extensión de ti mismo en la web.
